19/05/2011
Protección de tiburones y rayas
Oceana hace un llamamiento a los países del Mediterráneo para que refuercen la protección de los tiburones y rayas amenazados o en peligro en la reunión del Convenio de Barcelona que se celebra en Marsella. El encuentro es crucial para el futuro de diez especies del Mediterráneo, amenazadas por la sobrepesca a pesar de que ya figuran en una lista de especies cuyas capturas han de regularse por razones de conservación. En muchos casos sus poblaciones han disminuido hasta alcanzar menos del 1% de los niveles que tenían a mediados del siglo XX.
"La situación de los tiburones y rayas del Mediterráneo es desesperada", afirma Ricardo Aguilar, Director de Investigación de Oceana Europa. "Reconocer formalmente que estas especies están amenazadas o en peligro en el Anexo II del Convenio de Barcelona es un paso crucial para aumentar su nivel de protección. La UE y los 21 países signatarios del Convenio tienen la oportunidad y la responsabilidad de decidir el futuro de estas especies en el Mediterráneo".
El Mediterráneo es la región de mayor riesgo en todo el mundo para tiburones y rayas, con un 41% de las especies consideradas amenazadas, en comparación con un 17% a nivel internacional. De las diez especies que se tratarán en las reuniones de esta semana, algunas han sufrido graves descensos de la población, como el cailón, el marrajo y el pez martillo, cuyas poblaciones mediterráneas se han reducido en un 99,9% durante el siglo XX. Otras, como la raya falsa-vela, la raya de Malta y el pez guitarra común, han desaparecido de algunas zonas del Mediterráneo donde una vez fueron muy comunes.
Este grave declive se debe principalmente a la sobrepesca (tanto por capturas intencionadas como accidentales), así como a la degradación de sus hábitats. España es el país europeo que captura más tiburones. "El estado gravemente amenazado de estas especies y el hecho de que sigan capturándose demuestran claramente que las actuales medidas de conservación y de gestión de pesquerías son insuficientes", añade la Dra. Allison Perry, científica marina de Oceana Europa. "Se necesitan urgentemente mayores medidas de protección. La inclusión de estas especies en el Anexo II del Convenio de Barcelona haría que los países mediterráneos fueran responsables de garantizar la máxima protección posible y la recuperación de estos tiburones y rayas amenazados".
Los tiburones representan un importante papel en las cadenas tróficas marinas, actuando a menudo como depredadores superiores y ayudando a regular el equilibrio de los ecosistemas. Su desaparición afectaría por tanto a dicho equilibrio, causando cambios impredecibles en la abundancia y ladiversidad de otras especies.