08/10/2014

¿Oro negro en la costa vasca?

¿Oro negro en la costa vasca?

Dos multinacionales piden los permisos pertinentes para estudiar si el fondo marino vasco almacena gas o petróleo

La primera pepita de oro hallada en el aserradero de Sutter’s Mill desató una de las fiebres del oro más iconográficas de la historia. En pocos años hasta California llegaron en torno a 300.000 personas en busca de la riqueza que podía proporcionarles el preciado metal, lo que propició un crecimiento tal en la región que acabo por incorporarse como un estado más a los EE.UU. Más de siglo y medio después además de los metales es la búsqueda de hidrocarburos la que desata nuevas fiebres del oro negro. Con los recursos naturales limitados y el consumo al alza, las empresas del sector buscan nuevos pozos vírgenes que explotar.

El fondo marino vasco, por su situación geológica, es candidato a albergar gas o petróleo. De hecho hay precedentes, como el de La Gaviota. Dos de las multinacionales del sector están convencidas de que así puede ser y han dado el primer paso de un proceso largo y muy costoso para averiguarlo. En concreto, las filiales españolas de las petroleras Shell (Holanda) y Cairn Energy (Reino Unido) han solicitado formalmente y de forma conjunta permisos para investigar si el lecho marino situado a cien kilómetros de la costa vasca contiene o no los preciados hidrocarburos.

Al tratarse de espacio situado bajo aguas españolas las competencias corresponden al Gobierno español. Por ello, ha sido el Ministerio de Industria, Energía y Turismo el que publicó en el Boletín Oficial del Estado que estas dos empresas han realizado ya la solicitud. Es el proceso habitual antes de otorgar o no los permisos de investigación pertinentes. Ahora se abre un plazo de dos meses para presentar alegaciones o para que otras empresas competidoras hagan lo propio.

Shell y Capricorn, la filial de Cairn Energy en el Estado, han pedido permisos para investigar cinco puntos geográficos situados frente a las costas de Euskal Herria en el Cantábrico. Ello no implica que los vayan a conseguir. Se trata solo de un primer paso.
 
Aunque no ha trascendido cómo se realizaría ese estudio, lo cierto es que suele ser habitual que se utilicen ondas acústicas para ello. Las ondas se lanzan tierra adentro y del rebote obtenido, captado por hidrófonos, se puede conseguir plasmarlo en una imagen que demuestre qué es lo que la esconde el subsuelo y, en este caso, si hay o no hay hidrocarburos obtenibles.

No es la primera vez que en Euskadi se realizaría algo similar ya que hay un precedente frente a la costa de Bermeo. A ocho kilómetros de la costa, al noroeste del cabo Matxitxako, se encuentra la plataforma conocida como La Gaviota, visible desde la localidad costera. Fue en la década de los 70 del siglo pasado cuando se inició la exploración en el Golfo de Bizkaia en busca de posibles bolsas de hidrocarburos. Años más tarde se localizó una bolsa y se procedió a construir esta plataforma para su extracción.

Fuente: Deia